La ultima de las joyas tambien se puede realizar en cualquier momento. Este ejercicio distribuye la energía por todo el cuerpo, tonificandolo y aumentando el riego sanguineo en todos los vasos capilares. Activa todos los sentidos y nos prepara para la accion. Es como si el Qi acumulado en el interior del cuerpo, se manifestara en forma de descarga electrica, conectandonos con la realidad despues de haber realizado todas las joyas.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Es importante en general no levantar los pies del suelo, sino rebotar sobre la punta de los mismos, sin dejar caer el peso del cuerpo contra el suelo de forma descontrolada, para no producir daños en las rodillas y tobillos. Partimos de la posición inicial Wu Chi (pies paralelos y al ancho de
nuestros hombros, rodillas semi flexionadas y cadera ligeramente
basculada hacia delante). Nos elevamos poco a poco sobre la punta de los pies
empujando con la cima del cráneo hacia el cielo. El mentón queda
recogido hacia el cuello. Aguantamos un poco la posicion, dejamos caer el cuerpo descendiendo sin llegar a tocar el talon en el suelo, rebotando siete veces. Ascendemos de nuevo, y así hasta siete veces.
Respiración: Al elevarnos comenzaremos a inspirar, aguantaremos la posicion para sincronizar nuestra respiracion con la caida, donde empezaremos a soltar aire suavemente durante las siete veces que se rebota, hasta el momento que empezamos a inspirar de nuevo y vamos subiendo de nuevo.
Al concluir puede ser conveniente estirar los gemelos. Para ello
levantamos algo una de las piernas y estiramos los dedos de los pies
hacia nosotros tanto como podamos, lanzando el talón hacia adelante.
Después hacemos lo mismo con la otra pierna.
El hígado y la vesícula biliar se benefician de la realización de esta joya.
El Qi del hígado ensancha el yang y despliega el yin. Se regula la
energía generada con los ejercicios precedentes transmitiéndola a los
músculos.
El hígado y los ojos están totalmente relacionados, es más, los ojos son los indicativos de como está nuestro hígado. Es por ello que, para que fluya bien la energía al hígado, es muy importante mantener la
mirada de enfado en este ejercicio, puesto que nos ayudará a
drenar la ira y rabia acumulada, liberando al hígado de todo
bloqueo o estancamiento.
Tanto como si expresamos la ira como si no, siempre
nos afectará al día a día de la vida. Este ejercicio ayuda a liberar esta ira, con el flujo
energético. Estando el hígado más relajado, es más difícil
enojarse, o más fácil aceptar el enfado y
expresarlo sin dañarnos, ni dañar. Practicar Qigong, ayuda a aceptar las
emociones que sentimos sin taparlas, y a expresarlas de forma
saludable.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Damos un paso a la izquierda y doblamos las rodillas para adoptar la posición de un jinete. Mantenemos derecha la parte superior del cuerpo, con los
muslos paralelos al suelo. Columna recta,
sin flexionar las vértebras lumbares. Las rodillas no han de sobrepasar
la punta de los pies, de lo contrario podemos hacernos daño. Doblamos los brazos
hacia el cuerpo a la altura de la cintura, los puños cerrados con el
dorso de la mano hacia abajo y relajados. La vista se dirige hacia el
frente, los ojos bien abiertos.Desplegamos el brazo izquierdo hacia el frente mientras apretamos el
puño con fuerza (puñetazo), el círculo formado por el pulgar y el índice queda
mirando el cielo. El puño apretado con fuerza y la mirada fiera o con ojo de enfado, centrada
en un punto imaginario al horizonte. Los músculos de cara, cuello y
hombros han de estar relajados, solo tensaremos los ojos al fruncir el ceño y los puños. Abrimos la mano de dentro hacia afuera, para recoger energía, e inmediatamente al regresar, relajamos la mirada y los puños, mientras vamos estirando las rodillas y el brazo regresa a la altura de la cintura. Repetimos el movimiento con el puño derecho.
Respiración: Inspiramos y en el momento empezamos estirando el brazo vamos soltando aire, hasta dar el puñetazo, que seria el punto de máximo vacío. Al abrir la mano y coger energía, vamos inspirando, mientras regresamos el puño hasta llegar a la cintura que seria el punto de máxima inspiración.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecutan. A continuación os dejamos un vídeo para una mejor visualización de la realización del ejercicio:
El Zhan Zhuang es un ejercicio de Chi Kung estático y el tipo de trabajo
que se realiza se denomina meditación de pie. El trabajo es interno y
se desarrolla la energía. En el Zhang Zhuang se combina el trabajo
mental y muscular, con la respiración tranquila y la relajación. El
trabajo interno es potente, aunque no se aprecie a simple vista.
Si
realizamos bien el ejercicio, a los pocos segundos, empezaremos a sentir
como los diferentes músculos que no utilizamos habitualmente, empiezan a
quejarse. Nuestro trabajo consistirá en ir relajando todos los músculos
y tendones, logrando liberar bloqueos en la circulación del Qi por
todo el cuerpo y que este se equilibre de forma natural. Tomaremos
consciencia de tensiones crónicas como las que acumulamos en las
cervicales y los hombros. Haremos consciente nuestra respiración que se
volverá relajada, amplia y profunda de forma natural. Gradualmente
nuestro trabajo se centrará en ejercitar el mismo tipo de relajación con
la mente, es decir desarrollar su capacidad de atención y concentración
liberándola de tensiones y ruidos involuntarios.
Básicamente, la posición Zhan Zhuang es similar a la posición Wu Ji,
pues todo el cuerpo debe estar al igual, salvo los brazos que se elevan a
la altura de los hombros mas o menos. Las palmas de las manos enfocaran
al Dan Tien superior (pecho), los hombros caídos, al igual que los
codos, que siempre deberán estar por debajo de las muñecas, eliminando
todo tipo de tensiones. En la imagen de ejemplo, detallamos todos los principios a tener en cuenta en la posición.
Aconsejamos que se empiece por practicar la posición inicial Wu Ji, y
una vez se lleve unas semanas practicando esta posición y uno se sienta
cómodo en ella durante al menos 5 minutos, se podrá empezar a practicar
el Zhan Zhuang (abrazar el árbol). Y así gradualmente avanzaremos de una
posición a otra. Una vez dominadas las dos posiciones, es posible
combinarlas en la práctica.
El trabajo debe realizarse a diario
(bueno, tampoco pasa nada si empezáis por hacerlo tres veces a la
semana, pero es aconsejable que sea todos los días, pues iréis cogiendo
practica y notando los beneficios mas rápido). La práctica concluirá con
algún ejercicio de estiramiento y automasaje para ayudar a las zonas
que se resientan más del trabajo.
"La
capacidad de transformar la energía e incluso de crearla en el interior
de cada ser es uno de los profundos secretos de la vida. Como un árbol,
cada uno también es una gran central de energía de la naturaleza.
Comparte una gran afinidad con los incontables árboles que le rodean en
el planeta. Los árboles tienen mucho que enseñarnos. Están perfectamente
adaptados al ritmo de las estaciones. Combinan su inmensa fuerza con la
sensibilidad más delicada. Convierten la luz solar y el aire en
combustible. Comparten la tierra con otros, pero están seguros en su
propio interior. Al estar de pie, como un árbol, solo e inmóvil, se
llega a comprender todo lo que ocurre en el interior del ser, todos los
cambios internos que tienen lugar en los órganos y músculos. Es
necesario practicar constantemente. Cada uno nota las reacciones que
tienen lugar en su interior. Este sentimiento nunca acaba. Sigue y
sigue, una y otra vez. Este es el camino, no importa lo lejos que uno
vaya, nunca llegará al final de todas las cosas maravillosas que se
pueden descubrir."
El Qigong se compone de diferentes posturas, estas incluyen estiramientos y
torsiones para relajar el cuerpo. Contiene ejercicios de
respiración y flexibilidad articular combinadas con posturas corporales y relajación mental.
Esta práctica busca educar al cuerpo centrándose en la mente y
respiración para conseguir equilibrio entre la esencia denominada Jing, el espíritu o Shen y el Qi, consiguiendo así un estado de salud óptimo.
Las técnicas empleadas en el Qigong son
clasificadas según sus principios filosóficos, bien sean budistas,
confucionistas o taoístas. Además, existen distintas aplicaciones, es
decir, las marciales, espirituales o terapéuticas, cada una adaptándose a
las necesidades de la persona que lo practica.
A continuación os detallamos los principios esenciales para practicar Chi Kung y que harán que el Qi fluya armoniosamente por nuestro cuerpo:
Pensamiento: La persona debe estar concentrada en
visualizar mentalmente como la energía Qi recorre cada parte del cuerpo, y como va movilizándola con la intención mental , consiguiendo
elevar la energía positiva sobre cualquier dolencia o mal que esté albergado en el
cuerpo.
Actitud física y mental: La persona debe alejar
todo tipo de pensamientos, despejar la mente, concentrarse y entrar en
un estado de meditación y relajación completa.
Respiración: Debe ser suave y sincronizada con el movimiento o postura que se esté realizando.
Movimientos: Los movimientos deben ser suaves y
lentos, no debe existir rigidez y ningún tipo de esfuerzo muscular.
Según la escuela o especialidad que se practique, los movimientos serán
ejecutados estática o dinamicamente.
Qi Gong Estático o Yin: Es donde se realizan
meditaciones, fonación de sonidos y visualizaciones que conducen al
cúmulo de energía que nutre al organismo y le proporciona fuerza.
Qi Gong Dinámico o Yang: En este caso en Qi va
fluyendo de manera homogénea por cada parte del cuerpo, restableciendo
toda la energía que se encuentre estancada, logrando así producir un
equilibrio energético. Los ejercicios que se realizan son con palos o
pelotas según la técnica que se esté empleando.
El objetivo o finalidad de cada una de las practicas anteriores que
integran el Qi Gong es generar energía que reactive al cuerpo y lo
libere de todo mal, así esta podrá fluir fácilmente vitalizando las
zonas afectadas.
Uno de los principios básicos del Qigong es cuidar con detalle nuestra postura al estar de pie durante todos los ejercicios que se ejecuten. Adoptar una posicion incorrecta durante toda una practica nos puede dañar mas que beneficiar, por lo que es muy importante, la posicion que adoptemos para realizar toda la practica. Existen series de Chi Kung que se realizan sentado, pero la mayoria son de pie. Es más, el hecho de estar de pie, forma parte del Qigong, ya que existen movimientos que son totalmente estáticos, como por ejemplo el Zhan Zhuang Gong (estar quieto como un arbol), que ya hablaremos más adelante de él. Estar de pie, no solo implica cuidar la posicion, sino que ademas hay que prestar atencion a nuestra respiracion, y con la mente relajada. Para algunos al principio, puede parecer complicado o incluso molesto, pero profundizando e integrando la posicion con mucha practica, se pueden conseguir muchisimos beneficios.
Wu Chi, significa "vacio absoluto", de ahi que se utilice para el inicio de una practica de Qigong o como enlace entre dos movimientos, pues para empezar cualquier movimiento, hay que partir de una posicion de "vacio absoluto". Adoptando esta posición preparamos al cuerpo para el movimiento y lo hacemos desde la conciencia. Es como decirle a la mente y al cuerpo, “vamos a empezar” y lo hacemos de una manera consciente, observando la respiración, el estado del cuerpo y su relajacion, de la mente y su concentración... Con ella captamos la energía del cielo (Yang) y de la tierra (Yin) y las juntamos en el Dan Tien inferior, en el abdomen. Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Los pies se colocan paralelos a la distancia del ancho de hombros, con las puntas
mirando hacia el frente. Cerramos los ojos, y empezamos a respirar suavemente. Tomamos conciencia de las plantas de los pies, al contacto con la superficie y tratamos de que el peso se sienta aproximadamente en el
centro de la planta, tanto vertical como horizontalmente, repartiendo el peso por todas las plantas. Para ello, en
cuanto al eje vertical del peso de nuestro cuerpo, daremos un suave balanceo del cuerpo, hacia delante y atras, cambiando
el peso entre la punta y el talón, reduciendo
progresivamente el balanceo hasta quedar en el centro. En cuanto a la
horizontal, variaremos la distancia entre las rodillas, hasta encontrarnos comodos, buscando la estabilidad horizontal del peso de nuestro cuerpo. Imaginad como si unas raices empezaran a salir de la planta de vuestros pies, y estas raices cada vez se hacen mas grandes, enraizandote mas y mas, hasta el punto de sentir una conexion total con la tierra. Simultaneamente, tendremos en cuenta todos los siguientes aspectos...
Flexionaremos ligeramente las rodillas. Sentid como vamos eliminando la rigidez, como vamos relajando las piernas y al mismo tiempo repartiendo por igual el peso de tu tronco en las piernas. Esto permitirá que el Qi y la sangre fluyan bien por todo tu cuerpo.
La cadera, es el enlace entre tu tronco y las piernas, una mala posicion aqui, bloquearia el paso energetico entre piernas y tronco. Para ello, debemos dejar caer nuestra cadera, de tal manera que se bascule ligeramente hacia delante, sin obligarla, liberando de todo tipo de tension. El gesto de aflojar las rodillas debe hacer que el hueso sacro
vaya hacia abajo y al mismo tiempo un poco hacia adelante, reduciendo la curva que
suele tener la zona lumbar.
Dejamos caer los hombros, sintiendo el peso de los brazos. Debemos evitar cualquier tipo de tension en los hombros para no dañarnos durante la practica, y para ello hay que evitar subir los hombros y mantenerlos siempre caidos.
Con los ojos y los labios entreabiertos, apoyando la lengua en el paladar superior, metemos el menton ligeramente hacia dentro, estiramos ligeramente las cervicales, y empezamos a visualizar como si un hilo brillante, empieza a salir de la coronilla de nuestra cabeza y empieza a subir al cielo, cada vez mas alto, hasta el momento que empezamos a sentir como nuestras cervicales cada vez se estiran mas, hasta el punto de ir eliminando tension y rigidez en la zona cervical.
Cabeza y cuello: Hay una imagen fundamental en este trabajo que es
imaginar como un hilo que tira de la coronilla con suavidad hacia el
cielo. De esta manera estiramos ligeramente las cervicales hacia arriba.
El mentón puede ir en este movimiento ligerísimamente hacia dentro y
hacia abajo.
Es interesante también realizar un examen de todas las zonas del cuerpo, para ir relajandolas una a una, frente, ojos, mejilla, cuello, cuero cabelludo,
hombros, etc... tomando unos segundos para relajar cada zona.
La respiracion debe ser en todo momento, consciente, suave, pausada o relajada.
A continuación os dejamos un video explicativo, para que tengais una idea gráfica de como realizar correctamente este ejercicio estático:
Os recomendamos que al principio, mantengais esta posicion unas diez respiraciones, y a medida que integreis la posicion mejor, vayais incrementando el tiempo que querais, para poder tomar la maxima conciencia de nuestro cuerpo y espiritu.
Esperamos que estos consejos os sean de gran ayuda. Cualquier duda que podais tener, podeis dejar vuestros comentarios!