La ultima de las joyas tambien se puede realizar en cualquier momento. Este ejercicio distribuye la energía por todo el cuerpo, tonificandolo y aumentando el riego sanguineo en todos los vasos capilares. Activa todos los sentidos y nos prepara para la accion. Es como si el Qi acumulado en el interior del cuerpo, se manifestara en forma de descarga electrica, conectandonos con la realidad despues de haber realizado todas las joyas.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Es importante en general no levantar los pies del suelo, sino rebotar sobre la punta de los mismos, sin dejar caer el peso del cuerpo contra el suelo de forma descontrolada, para no producir daños en las rodillas y tobillos. Partimos de la posición inicial Wu Chi (pies paralelos y al ancho de
nuestros hombros, rodillas semi flexionadas y cadera ligeramente
basculada hacia delante). Nos elevamos poco a poco sobre la punta de los pies
empujando con la cima del cráneo hacia el cielo. El mentón queda
recogido hacia el cuello. Aguantamos un poco la posicion, dejamos caer el cuerpo descendiendo sin llegar a tocar el talon en el suelo, rebotando siete veces. Ascendemos de nuevo, y así hasta siete veces.
Respiración: Al elevarnos comenzaremos a inspirar, aguantaremos la posicion para sincronizar nuestra respiracion con la caida, donde empezaremos a soltar aire suavemente durante las siete veces que se rebota, hasta el momento que empezamos a inspirar de nuevo y vamos subiendo de nuevo.
Al concluir puede ser conveniente estirar los gemelos. Para ello
levantamos algo una de las piernas y estiramos los dedos de los pies
hacia nosotros tanto como podamos, lanzando el talón hacia adelante.
Después hacemos lo mismo con la otra pierna.
Esta joya trabaja específicamente los riñones y es uno de los mas completos ejercicios de esta serie. Consigue un gran estiramiento de toda la columna vertebral facilitando así el flujo del Qi por la órbita cósmica (circuito que forman los meridianos del vaso concepción y gobernador), flexibilizando todos los músculos de la espalda, piernas y brazos junto con los meridianos del riñón y vejiga. Es un ejercicio que se puede combinar con practicas internas para reponer le energía perdida a los riñones o simplemente para estimular su funcionamiento y ganar elasticidad general. Es un ejercicio especialmente útil para el invierno, pues es la estación del riñón. Este movimiento fortalece el Jing de riñón. En el pensamiento chino, el Jing se almacena en la región renal, punto Ming Men y existen dos tipos de Jing, el anterior y el posterior. El Jing anterior se refiere a la carga genética que heredamos de nuestros padres y ancestros. El Jing posterior es el que obtenemos de la calidad de la vida que llevamos (alimentación, hábitos de salud, etc...). El riñón es el encargado de almacenar y depurar energeticamente, la conjunción de estos dos tipos de Jing. Gracias a su función nuestras células se reproducen y diversifican, lo cual contribuye en una correcta función de nuestros órganos. Además, el Jing forma parte de los tres tesoros: Jing, Qi y Shen.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Partimos de la posición inicial Wu Chi (pies paralelos y al ancho de
nuestros hombros, rodillas semi flexionadas y cadera ligeramente
basculada hacia delante). Elevamos los brazos lateralmente por encima de la cabeza hasta enfrentar las
palmas de las manos. Volvemos las palmas hacia adelante. La mente se dirige
a hui yin (perineo). La espalda se ha de mantener recta mediante la retroversión
de la pelvis.Vamos agachándonos ligeramente, con la espalda recta
y sin sacar las nalgas. Las manos descienden con los brazos extendidos, por delante del
cuerpo, hasta agarrar los dedos de los pies (si es necesario doblamos las
rodillas). La espalda recta en la misma línea de brazos y manos. Al agacharte y coger las puntas de los pies, estiraremos ligeramente las rodillas sin soltar los dedos de los pies y proyectaremos el estiramiento a la espalda lo que podamos, aunque las piernas no
queden totalmente rectas, no pasa nada, ya irás cogiendo más
flexibilidad. Seguidamente soltamos los dedos de los pies y erguimos poco a poco el cuerpo con la ayuda de los brazos que se levantan por
delante y haciendo un círculo, dejamos reposar las manos en los riñones,
y nos centramos en Ming Men (en la espalda, entre los riñones). Estiramos el torso ligeramente hacia atrás mientras elevamos la mirada
hacia el cielo y exhalamos con la boca abierta.
Respiración: Este ejercicio se compone de dos respiraciones completas. Al ir bajando el tronco y los brazos iremos soltando aire, hasta cogerse de los pies y estirar, que seria el punto de máximo vacío. Al soltar los pies e ir subiendo el tronco iremos inspirando, hasta tener las manos reposadas en los riñones, y al estirar el torso hacia atrás, exhalaremos por la boca todo el aire. Seguidamente volveremos a elevar los brazos inspirando hasta llegara tener los brazos encima de nuestra cabeza estirados, para girar las palmas hacia abajo, momento que volveremos a bajar el tronco y con ello volviendo a inspirar.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecuta.
A continuación os dejamos un vídeo explicativo, para mejor compresión, y de esta manera os sea más fácil la ejecución desde casa:
Siempre que hay fuego en el corazón, implica que el yin del corazón está comprimido y el yang predomina. Este ejercicio potencia el yin de riñón, para apagar ese fuego del corazón. Equilibra la relación entre los elementos agua y fuego, y con ello la relación entre el riñón y el corazón. Un desequilibrio entre estas dos energías se reflejara en ansiedad, insomnio, nerviosismo, estrés, palpitaciones, arritmias, hipertensión, cefaleas etc..., todo ello consecuencia de un exceso de fuego y una carencia de agua. Otro elemento frío que también interviene en la liberación de fuego en este ejercicio es el metal, pues al inhalar, el pulmón del lado que corresponde a la pierna flexionada, absorbe el fuego del corazón. Al exhalar, ese fuego ya enfriado por el pulmón, se expulsa al exterior, disminuyendo el yang y nutriendo el yin, y con ello sosegando el cuerpo y el espíritu. Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Damos un paso a la
izquierda y doblamos las rodillas para adoptar la posición de un jinete.
Apoyamos las manos en las pantorrillas como sujetando las rodillas.
Flexionamos el tronco hacia la izquierda y al mismo tiempo vamos bajando al centro, como haciendo un péndulo o arco con el tronco. La
espalda ha de mantenerse recta en todo momento. A medida que vamos bajando, iremos cargando el peso
del cuerpo sobre la pierna izquierda, que permanece flexionada, mientras la
derecha se estira. El hombro derecho se vuelca hacia atrás a fin de
estirar todo el costado derecho. El brazo izquierdo permanece doblado y el
derecho se estira simultáneamente. Al pasar por el centro, la vista se dirige a la punta del pie
derecho, pero sin inclinar la cabeza, y comenzamos a subir nuestro tronco como un péndulo, hacia el lado derecho, y al mismo tiempo pasando el peso a la pierna derecha, hasta llegar a subir completamente y echar mirada al lado derecho, con el tronco totalmente recto. Mantenemos la postura un momento, y retornamos de nuevo al
centro para repetir el mismo ejercicio.
Respiración: Al iniciar la bajada haciendo el arco con nuestro tronco, iremos soltando aire hasta llegar al centro que sería, el punto de máximo vacío. A partir de ahí al ir subiendo para completar el arco, empezaremos a inspirar hasta llegar al lado contrario y haber pasado por completo el peso a la otra pierna. Mantendremos la posición, y al bajar de nuevo, volveremos a soltar, y así sucesivamente.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecuta.
A continuación os dejamos un video explicativo, donde podreis entender mejor el movimiento, y así os sea más fácil practicarlo desde vuestras casas:
Esta joya consigue fortalecer toda la musculatura del cuello y hombros, refuerza el globo ocular y el nervio óptico mejorando la visión, alivia los dolores de cabeza y realiza un masaje a los músculos y órganos abdominales, estirando también los meridianos del hígado y vesícula, dispersando la energía perversa del hígado a través de la mirada. Según la medicina tradicional china, con esta joya, se deriva energía del Dantien (punto energético situado tres dedos por debajo del ombligo) a la tierra, con el objetivo de eliminar la energía contaminada procedente de las enfermedades de los cinco órganos: hígado, corazón, bazo, pulmones y riñones, dañados por las energías climáticas del viento, calor, humedad, sequedad o el frió, o las dietéticas de los sabores ácido, amargo, dulce, picante o salado, y con todo ello las siete emociones fundamentales, cólera, alegría excesiva, pena, tristeza, desesperación, temor y pánico.
Esta pieza, a simple vista parece fácil, pero en realidad, nos daremos cuenta que ejecutarla bien, es complicado. Con el tiempo, a medida que vayamos practicándola, nos iremos dando cuenta de que el ejercicio cada vez fluye mejor, al mismo tiempo que iremos notando los beneficios mas notablemente.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Partimos de la posición inicial Wu Chi (pies paralelos y al ancho de nuestros hombros, rodillas semi flexionadas y cadera ligeramente basculada hacia delante). Manteniendo la cabeza y nuestro tronco mirando al frente, empezamos a girar los ojos hacia un lado, sin mover la cabeza. Luego, sin mover los hombros, giraremos la cabeza hacia el mismo lado. Seguidamente, giraremos hacia el mismo lado los hombros acompañando con el tronco, pero con la cadera mirando al frente, y echaremos una mirada al infinito hacia atrás. Volveremos con el mismo orden pero al revés, e iremos poniendo nuestra atención e intención en nuestro Dantien, y vamos regresando primero el tronco y los hombros, luego la cabeza, y finalmente los ojos, quedando mirando al frente. El ejercicio se repetirá hacia el otro lado.
Respiración: Inspiramos, y al empezar a soltar aire, giramos los ojos, luego cabeza y hombros, hasta llegar a la mirada hacia atrás, que seria el punto de máximo vacío de aire. Al regresar el tronco y hombros, empezaremos a inspirar hasta llegar a la mirada al frente que seria el punto de máxima inspiración.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecuta.
A continuación os dejamos un vídeo para que desde vuestras casas os sea más fácil ententerdo y realizarlo.
El hígado y la vesícula biliar se benefician de la realización de esta joya.
El Qi del hígado ensancha el yang y despliega el yin. Se regula la
energía generada con los ejercicios precedentes transmitiéndola a los
músculos.
El hígado y los ojos están totalmente relacionados, es más, los ojos son los indicativos de como está nuestro hígado. Es por ello que, para que fluya bien la energía al hígado, es muy importante mantener la
mirada de enfado en este ejercicio, puesto que nos ayudará a
drenar la ira y rabia acumulada, liberando al hígado de todo
bloqueo o estancamiento.
Tanto como si expresamos la ira como si no, siempre
nos afectará al día a día de la vida. Este ejercicio ayuda a liberar esta ira, con el flujo
energético. Estando el hígado más relajado, es más difícil
enojarse, o más fácil aceptar el enfado y
expresarlo sin dañarnos, ni dañar. Practicar Qigong, ayuda a aceptar las
emociones que sentimos sin taparlas, y a expresarlas de forma
saludable.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Damos un paso a la izquierda y doblamos las rodillas para adoptar la posición de un jinete. Mantenemos derecha la parte superior del cuerpo, con los
muslos paralelos al suelo. Columna recta,
sin flexionar las vértebras lumbares. Las rodillas no han de sobrepasar
la punta de los pies, de lo contrario podemos hacernos daño. Doblamos los brazos
hacia el cuerpo a la altura de la cintura, los puños cerrados con el
dorso de la mano hacia abajo y relajados. La vista se dirige hacia el
frente, los ojos bien abiertos.Desplegamos el brazo izquierdo hacia el frente mientras apretamos el
puño con fuerza (puñetazo), el círculo formado por el pulgar y el índice queda
mirando el cielo. El puño apretado con fuerza y la mirada fiera o con ojo de enfado, centrada
en un punto imaginario al horizonte. Los músculos de cara, cuello y
hombros han de estar relajados, solo tensaremos los ojos al fruncir el ceño y los puños. Abrimos la mano de dentro hacia afuera, para recoger energía, e inmediatamente al regresar, relajamos la mirada y los puños, mientras vamos estirando las rodillas y el brazo regresa a la altura de la cintura. Repetimos el movimiento con el puño derecho.
Respiración: Inspiramos y en el momento empezamos estirando el brazo vamos soltando aire, hasta dar el puñetazo, que seria el punto de máximo vacío. Al abrir la mano y coger energía, vamos inspirando, mientras regresamos el puño hasta llegar a la cintura que seria el punto de máxima inspiración.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecutan. A continuación os dejamos un vídeo para una mejor visualización de la realización del ejercicio:
El conjunto bazo-estomago es de vital importancia para regular las funciones digestivas y mantener nuestras emociones negativas como la ansiedad, los bloqueos y las preocupaciones excesivas dentro de unos limites aceptables, aportando sentimientos de estabilidad y realismo.
Este ejercicio es ideal y su práctica estira todos los meridianos correspondientes al bazo-páncreas y estomago, produciendo un drenaje del Qi estancado y permitiendo que fluya de esta manera el Qi renovado. También produce un estiramiento de los músculos del torso y de los brazos, relajándolos y aportando una agradable sensación de calma y descanso. Es un poco como desperezarse de forma natural, incluso bostezando para expulsar el Qi estancado.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Empezando con la mano izquierda estirada pero no del todo, y la palma mirando hacia el suelo. La mano derecha estirada pero no del todo, con la palma mirando hacia el cielo, como separando el cielo de la tierra. Las rodillas estiradas y la espalda recta. Poco a poco vamos girando las palmas como conectando una palma con la otra, las rodillas acompañan el movimiento flexionándolas un poco, y vamos juntando las manos. La mano izquierda sube máximo hasta la altura del Dan Tien (3 dedos por debajo del ombligo) y la derecha baja, pero nunca se toca una palma con la otra, simplemente la derecha sigue bajando hasta volver a repetir el ejercicio pero con las manos invertidas.
Respiración: Al ir bajando las manos hasta enfrentarlas una con la otra, se ira inspirando por la nariz, luego al ir separando las manos se empezara a soltar aire hasta que finalizamos la espiración cuando separamos cielo y tierra.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecutan.
A continuación os hemos preparado el siguiente video, donde os detallamos la correcta ejecución del ejercicio, para que así podais practicarlo desde vuestras casas.
A nivel energético, activamos el meridiano de pulmón, lo que
favorecerá todas sus funciones, esto es gracias al movimiento de los
brazos, puesto que el meridiano de pulmón se inicia en el tórax y
finaliza, recorriendo el brazo, en el pulgar y a la apertura que se debe
realizar al “tensar el arco”, activamos el meridiano de Ren Mai. El
movimiento horizontal de extensión y relajación abre y cierra la
caja torácica masajeando suavemente los pulmones. La parte anterior del
tórax estimula la glándula del timo. Fortalece los riñones y el Dai Mai
(vaso cintura), situado en la cintura. Una de las funciones del Riñón,
en Medicina Tradicional China, es la de fortalecer los huesos y esta
posición, ayuda a aumentar la producción osea.
La emoción asociada al pulmón es la tristeza, así pues, este ejercicio,
alivia la tristeza, mejora la depresión y la melancolía. Aporta ganas de
vivir. Mejora el sistema inmune, prepara al cuerpo para el invierno,
mejora todas las afecciones del sistema respiratorio. Fortalece las
piernas. Agudiza la vista. Fortalece los huesos y la columna vertebral, evitando
la aparición de osteoporosis. Beneficia la correcta circulación de Qi de
los meridianos de las piernas, tanto de los Yin (Riñón, Hígado y Bazo)
como de los Yang (Estómago, Vesícula Biliar y Vejiga). Mejora la
lateralidad del cerebro (buena comunicación de los dos hemisferios
cerebrales). Vigoriza el cuerpo. Aumenta la fuerza de voluntad.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Se abren las piernas al igual que un jinete. Se estiran las rodillas y se cruzan las manos en el pecho. Miramos hacia un lado y empezamos ha separar los brazos, simulando estar tirando una flecha. Al mismo tiempo vamos flexionando las rodillas. Es muy importante que las rodillas no sobrepasen la perpendicular a las puntas de los pies, y la espalda siempre se mantenga recta, mirando al frente. Y finalmente apuntamos con el dedo índice, levantándolo, y mirando al dedo con el ojo del mismo lado. Osea si apuntamos a la izquierda, solo miraremos con el ojo izquierdo, cerrando el derecho y apuntando al dedo con el índice levantado. Estiramos las rodillas y los dos brazos suavemente, y vamos recogiéndolos en forma circular, hasta volver a situarlos en el pecho.
Respiración: Al flexionar se empieza a soltar el aire hasta el punto de máximo vacío que seria apuntar. Al estirar rodillas y empezar a recoger brazos, empezaremos a inspirar hasta llevar las manos de nuevo cruzadas en el pecho.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecutan.
A continuación os dejamos un vídeo para mejor visualización del movimiento:
Ejercicio que también puede recibir el nombre de "Sostener el cielo con las manos". Este movimiento trata de activar las funciones del triple
calentador. Las tres áreas o “recalentadores” están ubicados por encima
del diafragma, y entre este, el ombligo, y el pubis.
Los tres están relacionados respectivamente con la respiración, la digestión y la
eliminación. El triple calentador, no hace referencia a una entraña o estructura física. Se refiere a un conjunto de funciones del organismo. Al metabolismo, y la capacidad de transformación.
Recalentador superior: en el tórax. Relación con Pulmón, Corazón y energía respiratoria.
Recalentador medio: en el abdomen, bajo el diafragma.
Relación con Bazo, Estómago, Vesícula Biliar, Hígado, intestinos, la
digestión, transformación de nutrientes en energía nutritiva.
Recalentador inferior: en el bajo vientre. Relación con Riñón, Vejiga, sistema reproductor.
La elevación de las manos entrelazadas y el descenso con
los brazos estirados ayuda a mejorar la circulación de la sangre y del qi (energía vital) dentro de los órganos. Además, a nivel mecánico, realizar los estiramientos en la parte
superior del cuerpo, aumenta la flexibilidad y mejora el rango de
movimiento de las articulaciones, ayudando a prevenir y mejorar
problemas en los hombros y cervicales. Combate la fatiga,
dolores y contracturas de espalda. Estira la caja torácica, liberando
los pulmones y aumentando nuestra capacidad pulmonar.
Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Se entrelazan los dedos de las manos, a la altura del Dantien (3 dedos por debajo del ombligo), con las palmas hacia arriba. Poco a poco se van elevando hasta llegar a la cara, al mismo tiempo que las rodillas se estiran un poco. A partir de la cara las palmas dan la vuelta hacia arriba para buscar la dirección del cielo, y al llegar a sujetar el cielo, se elevan un poco los talones. Seguidamente se bajan los talones, y se separan las manos, para ir bajando los brazos estirados en forma circular por los laterales, y al mismo tiempo flexionando de nuevo las rodillas, para volver a buscar las palmas unidas, a la altura del Dantien.
Respiración: La respiración se realizara de la siguiente manera... Al empezar a elevar las manos hacia arriba iremos inspirando por la nariz, progresivamente hasta llegar al cielo. Una vez bajamos los talones y empezamos a bajar los brazos en círculo por el lateral, iremos soltando el aire, preferiblemente por la nariz, pero la expiración, es opcional realizarla por la boca.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecutan.
Para todos aquellos que queráis practicar en casa y perfeccionar el movimiento, a continuación os dejamos un video explicativo que esperamos que os guste!
El Baduan Jin o las ocho piezas del brocado de seda, es una
de las secuencias de movimientos más antiguas en la práctica del Qigong o Chi Kung, conocida como “Los ocho brocados”,
“Los ocho tesoros” o “Las ocho joyas”, calificativos muy acertados, pues en la vida consideramos de mucho valor, todo aquello
que nos proporciona salud mental, física y emocional.
Algo de historia
Las Ocho piezas del Brocado de seda fueron creadas por el
general Yeuh Fei con el fin de mejorar las condiciones de salud y
aptitud física de sus regimientos. Historiadores expresan que
originalmente las secuencias de movimientos de este estilo eran doce,
pero que, con la transmisión de esta tradición de maestro a alumno por
más de ocho siglos, se fue simplificando hasta quedar establecida la
secuencia de ocho movimientos que se conoce en la actualidad.
Yeuh Fei fue un campesino muy pobre, que gracias al apoyo
de su familia logró formarse como un gran erudito en muchas ramas del
conocimiento, este renombre en su momento también permitió que
uno de los hombres más sabios de su región se fijara en él y después de
conocerlo personalmente lo tomara bajo su protección. Esto no solo lo
ayudó a ampliar aún más sus conocimientos, sino que también llegó a ser uno de los grandes maestros del Kung Fu, dominando estilos de mano vacía, arquería y otras armas. En China es considerado como uno los más valientes y sabios héroes en toda su historia y aún hoy en día es objeto de grandes muestras de respeto y admiración.
Como realizar los ejercicios
El Baduan Jin es una serie de ejercicios de Qigong que permiten el desarrollo de la Energía Vital (Qi o Chi), esto quiere decir que desde la parte externa del cuerpo, las extremidades, se fomenta la circulación del Chi por
todo el cuerpo, logrando así el funcionamiento óptimo de todos nuestros
órganos internos, la estabilización de las emociones y nuestro estado
mental.
Esta forma de “meditación en movimiento” es muy apreciada, no solo por su sencillez, sino también, por la posibilidad de ejecutarla tanto de pie
como sentado, permitiendo a personas con algún impedimento o
discapacidad la oportunidad de recibir todos los beneficios que su
práctica diaria conlleva.
Cada maestro de Taichi o Chi Kung,
puede enseñar el sistema con ligeras variantes, de acuerdo a su estilo y
formación. Lo importante es respetar su esencia y desarrollar la
secuencia, con la correcta intención mental y de una manera coordinada
con la respiración, de esta manera se logra mantener su efectividad.
Aun conociendo los ocho movimientos, es importante respetar
la secuencia original ya que cada movimiento prepara al cuerpo para el
siguiente y cada órgano recibe el beneficio de la correcta ejecución del
ejercicio. Es ideal comenzar con ejercicios de respiración
profunda y algunos movimientos de calentamiento para preparar el cuerpo y
la mente para recibir los beneficios de la práctica.
La secuencia es la siguiente:
1. Dos manos sujetan el cielo para armonizar. Se entrelazan los dedos de las manos se llevan a la frente y luego se extiende hacia arriba.
2.Abrir el arco a la izquierda y a la derecha para disparar al halcón.
Se separan las piernas hasta alcanzar la posición de jinete y extender
el brazo izquierdo, recoger el derecho en un puño y apuntar hacia el
lado izquierdo. Se repite hacia el otro lado.
3. Separar el cielo y la tierra. Delicadamente se baja una mano en dirección al suelo y después la otra sube al cielo, como separando uno de otro.
4 Baja el cuerpo y aprieta el puño con ojo de enfado. En posición de jinete se llevan ambos puños a los lados de la cintura y se ejecutan 3 golpes con cada puño.
5. Girar la cabeza y mirar hacia atrás, para evitar consumirse. Incorporarse lentamente con los brazos a los lados y las palmas al frente girando la cabeza a cada lado en toda su extensión.
6. Menea tu cola y balancea tu cabeza, nuevamente
desde la posición de jinete se describen círculos amplios que incluya
toda la parte superior del cuerpo, hacia un lado y luego al otro, tres
veces.
7. Llevar las manos de los pies al suelo y agarrase los pies. Finalmente juntamos los pies y descendemos el torso hasta tomarnos de los tobillos.
8. Empinarse en la punta de los pies y rebotar siete veces.
Esto se considera una serie completa y se recomienda repetirla de tres a
ocho veces de acuerdo a la capacidad física del practicante y a su
dominio sobre los movimientos que se ejecutan. Al final del post os facilitamos un video para todos aquellos que querais ir practicando desde vuestras casas, y en próximos posts iremos desgranando ejercicio por ejercicio, para que podáis profundizar más en esta serie tan apasionante y beneficiosa para la salud.
Esta actividad os permitirá iniciaros en la disciplina del Qigong. No dejéis perder esta oportunidad de aprender, y estar al día de todos nuestros nuevos consejos, siguiéndonos en nuestro blog Qigong Valencia.
Si queréis añadir algún comentario o tenéis alguna duda, estaremos encantados de ayudaros.
El Zhan Zhuang es un ejercicio de Chi Kung estático y el tipo de trabajo
que se realiza se denomina meditación de pie. El trabajo es interno y
se desarrolla la energía. En el Zhang Zhuang se combina el trabajo
mental y muscular, con la respiración tranquila y la relajación. El
trabajo interno es potente, aunque no se aprecie a simple vista.
Si
realizamos bien el ejercicio, a los pocos segundos, empezaremos a sentir
como los diferentes músculos que no utilizamos habitualmente, empiezan a
quejarse. Nuestro trabajo consistirá en ir relajando todos los músculos
y tendones, logrando liberar bloqueos en la circulación del Qi por
todo el cuerpo y que este se equilibre de forma natural. Tomaremos
consciencia de tensiones crónicas como las que acumulamos en las
cervicales y los hombros. Haremos consciente nuestra respiración que se
volverá relajada, amplia y profunda de forma natural. Gradualmente
nuestro trabajo se centrará en ejercitar el mismo tipo de relajación con
la mente, es decir desarrollar su capacidad de atención y concentración
liberándola de tensiones y ruidos involuntarios.
Básicamente, la posición Zhan Zhuang es similar a la posición Wu Ji,
pues todo el cuerpo debe estar al igual, salvo los brazos que se elevan a
la altura de los hombros mas o menos. Las palmas de las manos enfocaran
al Dan Tien superior (pecho), los hombros caídos, al igual que los
codos, que siempre deberán estar por debajo de las muñecas, eliminando
todo tipo de tensiones. En la imagen de ejemplo, detallamos todos los principios a tener en cuenta en la posición.
Aconsejamos que se empiece por practicar la posición inicial Wu Ji, y
una vez se lleve unas semanas practicando esta posición y uno se sienta
cómodo en ella durante al menos 5 minutos, se podrá empezar a practicar
el Zhan Zhuang (abrazar el árbol). Y así gradualmente avanzaremos de una
posición a otra. Una vez dominadas las dos posiciones, es posible
combinarlas en la práctica.
El trabajo debe realizarse a diario
(bueno, tampoco pasa nada si empezáis por hacerlo tres veces a la
semana, pero es aconsejable que sea todos los días, pues iréis cogiendo
practica y notando los beneficios mas rápido). La práctica concluirá con
algún ejercicio de estiramiento y automasaje para ayudar a las zonas
que se resientan más del trabajo.
"La
capacidad de transformar la energía e incluso de crearla en el interior
de cada ser es uno de los profundos secretos de la vida. Como un árbol,
cada uno también es una gran central de energía de la naturaleza.
Comparte una gran afinidad con los incontables árboles que le rodean en
el planeta. Los árboles tienen mucho que enseñarnos. Están perfectamente
adaptados al ritmo de las estaciones. Combinan su inmensa fuerza con la
sensibilidad más delicada. Convierten la luz solar y el aire en
combustible. Comparten la tierra con otros, pero están seguros en su
propio interior. Al estar de pie, como un árbol, solo e inmóvil, se
llega a comprender todo lo que ocurre en el interior del ser, todos los
cambios internos que tienen lugar en los órganos y músculos. Es
necesario practicar constantemente. Cada uno nota las reacciones que
tienen lugar en su interior. Este sentimiento nunca acaba. Sigue y
sigue, una y otra vez. Este es el camino, no importa lo lejos que uno
vaya, nunca llegará al final de todas las cosas maravillosas que se
pueden descubrir."
La sabiduría taoísta entiende la respiración como el
componente más importante para el cuerpo y la mente. Es mucho más
poderosa que la alimentación recibida a través de los alimentos y
bebidas. El Chi Kung es una legendaria rama de la
medicina china, destinada a enseñar el control del ejercicio
respiratorio, un arte ancestral
dedicada a la sanación, a través de la energía en el aire. Aprender a respirar regula el equilibrio entre el Ying y el Yang. Y
cuando respirar, se convierte en una herramienta dominada a voluntad, es
capaz de
regular todas las funciones vitales del ser humano.
Así como la dieta afecta al equilibrio bioquímico del cuerpo, la respiración afecta al equilibrio bioeléctrico.
Existen dos tipos de respiración: la limpiadora y la energizante.
La
respiración limpiadora desintoxica el cuerpo y se centra en la
espiración.
La respiración energizante recoge y acumula energía
vital, y se concentra más en la inspiración.
Aunque hoy en día la gente
no suele prestar mucha atención a cómo respira, todo el mundo practica
estas dos clases de respiración a lo largo del día sin ser consciente de
ello. Por ejemplo, el suspiro es una respiración limpiadora espontánea,
pues consta de una inspiración rápida seguida de una espiración larga y
forzada. El bostezo, en cambio, es una respiración energizante
espontánea, ya que se trata de una inhalación larga, lenta y profunda,
brevemente retenida en los pulmones, seguida de una exhalación
relativamente corta.
En Oriente, la respiración se considera una
ciencia. En China lo llaman Qigong conocido en occidente como Chi Kung,
pero el mundo occidental ni siquiera posee un término específico para
designar el control de la respiración.
Las propiedades del aire
La palabra "Chi" tiene como acepción el aliento. El primer
contacto es la inhalación que se produce al salir del cuerpo de la madre.
El oxígeno se transporta por medio de la sangre, para ser llevado a
cada célula. La energía vital o "Chi", se difunde por los meridianos como
un tejido invisible. Cuando este sistema natural se obstruye, comienzan a
generarse malestares como fatiga, dolor de cabeza y otras
enfermedades. Por ello, una correcta respiración es un acto de depuración, estimulación y mejoramiento del sistema inmunitario. La calidad del aire determina este proceso. Su energía depende de los iones negativos y positivos que lo integran. Los
agentes contaminantes, se transforman en iones polimoleculares de base
positiva. Los iones negativos purificadores, abundan en los espacios
libres de químicos.
Analizando esta realidad, es normal que al encontrarse en lugares sin toxinas, el cuerpo se halle en mayor armonía. Por lo tanto, sería ideal ejecutar los ejercicios de respiración controlada cerca de la naturaleza.
A continuación os dejamos un vídeo, en el cual hacemos una sesión de respiración, para aquellos que quieran aprender a tener una respiración consciente, o también aquellos que quieran entrenar su respiración más a fondo.
El Qigong se compone de diferentes posturas, estas incluyen estiramientos y
torsiones para relajar el cuerpo. Contiene ejercicios de
respiración y flexibilidad articular combinadas con posturas corporales y relajación mental.
Esta práctica busca educar al cuerpo centrándose en la mente y
respiración para conseguir equilibrio entre la esencia denominada Jing, el espíritu o Shen y el Qi, consiguiendo así un estado de salud óptimo.
Las técnicas empleadas en el Qigong son
clasificadas según sus principios filosóficos, bien sean budistas,
confucionistas o taoístas. Además, existen distintas aplicaciones, es
decir, las marciales, espirituales o terapéuticas, cada una adaptándose a
las necesidades de la persona que lo practica.
A continuación os detallamos los principios esenciales para practicar Chi Kung y que harán que el Qi fluya armoniosamente por nuestro cuerpo:
Pensamiento: La persona debe estar concentrada en
visualizar mentalmente como la energía Qi recorre cada parte del cuerpo, y como va movilizándola con la intención mental , consiguiendo
elevar la energía positiva sobre cualquier dolencia o mal que esté albergado en el
cuerpo.
Actitud física y mental: La persona debe alejar
todo tipo de pensamientos, despejar la mente, concentrarse y entrar en
un estado de meditación y relajación completa.
Respiración: Debe ser suave y sincronizada con el movimiento o postura que se esté realizando.
Movimientos: Los movimientos deben ser suaves y
lentos, no debe existir rigidez y ningún tipo de esfuerzo muscular.
Según la escuela o especialidad que se practique, los movimientos serán
ejecutados estática o dinamicamente.
Qi Gong Estático o Yin: Es donde se realizan
meditaciones, fonación de sonidos y visualizaciones que conducen al
cúmulo de energía que nutre al organismo y le proporciona fuerza.
Qi Gong Dinámico o Yang: En este caso en Qi va
fluyendo de manera homogénea por cada parte del cuerpo, restableciendo
toda la energía que se encuentre estancada, logrando así producir un
equilibrio energético. Los ejercicios que se realizan son con palos o
pelotas según la técnica que se esté empleando.
El objetivo o finalidad de cada una de las practicas anteriores que
integran el Qi Gong es generar energía que reactive al cuerpo y lo
libere de todo mal, así esta podrá fluir fácilmente vitalizando las
zonas afectadas.
Los beneficios de practicar Qigong, van desde mejoras en la condición física, emocional, mental hasta
equilibrio en el campo espiritual de la persona, además, ayuda a calmar
la mente y fortalece el cuerpo.
Mentales: Al disminuir los pensamientos negativos
aumenta la capacidad de la memoria y la concentración, lo que hace que
toda la energía se distribuya por cada parte del cuerpo. Todo en
conjunto rehabilita la mente, elimina las preocupaciones, regula el insomnio y a su vez produce claridad mental.
Físicos: La respiración al ser diafragmática
estimula a su vez a los órganos del cuerpo, aumenta la capacidad que
tienen comúnmente los pulmones para contener el oxigeno, activa y
restablece la circulación sanguínea y estimula el tránsito intestinal.
Mientras que los suaves movimientos físicos que se realizan en cada
postura se ejercitan los músculos, va reduciendo los dolores o molestias en las articulaciones, desarrolla la flexibilidad y previene que aumente el sedentarismo.
Espirituales: Una de las finalidades de estos
ejercicios es estar en sintonía y completa armonía con la naturaleza, a
su vez abre los caminos para el desarrollo de ciertas cualidades
mientras se transforma de manera positiva el interior del ser. El Qigong
o Chi Kung es una filosofía de vida, que ayuda a la persona a
establecer y sobre todo mantener hábitos que sean saludables para mejorar y alargar su vida.
Emocionales: Al estar concentrados y relajados, los meridianos o
canales por donde fluye la energía, se energetizan y empieza a regularse la
circulación sanguínea por los órganos vitales del cuerpo es decir:
corazón, bazo, hígado, pulmones, riñones y cerebro. Según los relatos de
la medicina tradicional china, en la ley de los Cinco Elementos se
detalla que cada órgano está ligado a una emoción. Es decir, el corazón
aloja la euforia, el bazo la preocupación, la ira se encuentra en el
hígado, el miedo en los riñones y la tristeza en los pulmones.
Uno de los principios básicos del Qigong es cuidar con detalle nuestra postura al estar de pie durante todos los ejercicios que se ejecuten. Adoptar una posicion incorrecta durante toda una practica nos puede dañar mas que beneficiar, por lo que es muy importante, la posicion que adoptemos para realizar toda la practica. Existen series de Chi Kung que se realizan sentado, pero la mayoria son de pie. Es más, el hecho de estar de pie, forma parte del Qigong, ya que existen movimientos que son totalmente estáticos, como por ejemplo el Zhan Zhuang Gong (estar quieto como un arbol), que ya hablaremos más adelante de él. Estar de pie, no solo implica cuidar la posicion, sino que ademas hay que prestar atencion a nuestra respiracion, y con la mente relajada. Para algunos al principio, puede parecer complicado o incluso molesto, pero profundizando e integrando la posicion con mucha practica, se pueden conseguir muchisimos beneficios.
Wu Chi, significa "vacio absoluto", de ahi que se utilice para el inicio de una practica de Qigong o como enlace entre dos movimientos, pues para empezar cualquier movimiento, hay que partir de una posicion de "vacio absoluto". Adoptando esta posición preparamos al cuerpo para el movimiento y lo hacemos desde la conciencia. Es como decirle a la mente y al cuerpo, “vamos a empezar” y lo hacemos de una manera consciente, observando la respiración, el estado del cuerpo y su relajacion, de la mente y su concentración... Con ella captamos la energía del cielo (Yang) y de la tierra (Yin) y las juntamos en el Dan Tien inferior, en el abdomen. Su ejecución sería de la siguiente manera:
Ejecución: Los pies se colocan paralelos a la distancia del ancho de hombros, con las puntas
mirando hacia el frente. Cerramos los ojos, y empezamos a respirar suavemente. Tomamos conciencia de las plantas de los pies, al contacto con la superficie y tratamos de que el peso se sienta aproximadamente en el
centro de la planta, tanto vertical como horizontalmente, repartiendo el peso por todas las plantas. Para ello, en
cuanto al eje vertical del peso de nuestro cuerpo, daremos un suave balanceo del cuerpo, hacia delante y atras, cambiando
el peso entre la punta y el talón, reduciendo
progresivamente el balanceo hasta quedar en el centro. En cuanto a la
horizontal, variaremos la distancia entre las rodillas, hasta encontrarnos comodos, buscando la estabilidad horizontal del peso de nuestro cuerpo. Imaginad como si unas raices empezaran a salir de la planta de vuestros pies, y estas raices cada vez se hacen mas grandes, enraizandote mas y mas, hasta el punto de sentir una conexion total con la tierra. Simultaneamente, tendremos en cuenta todos los siguientes aspectos...
Flexionaremos ligeramente las rodillas. Sentid como vamos eliminando la rigidez, como vamos relajando las piernas y al mismo tiempo repartiendo por igual el peso de tu tronco en las piernas. Esto permitirá que el Qi y la sangre fluyan bien por todo tu cuerpo.
La cadera, es el enlace entre tu tronco y las piernas, una mala posicion aqui, bloquearia el paso energetico entre piernas y tronco. Para ello, debemos dejar caer nuestra cadera, de tal manera que se bascule ligeramente hacia delante, sin obligarla, liberando de todo tipo de tension. El gesto de aflojar las rodillas debe hacer que el hueso sacro
vaya hacia abajo y al mismo tiempo un poco hacia adelante, reduciendo la curva que
suele tener la zona lumbar.
Dejamos caer los hombros, sintiendo el peso de los brazos. Debemos evitar cualquier tipo de tension en los hombros para no dañarnos durante la practica, y para ello hay que evitar subir los hombros y mantenerlos siempre caidos.
Con los ojos y los labios entreabiertos, apoyando la lengua en el paladar superior, metemos el menton ligeramente hacia dentro, estiramos ligeramente las cervicales, y empezamos a visualizar como si un hilo brillante, empieza a salir de la coronilla de nuestra cabeza y empieza a subir al cielo, cada vez mas alto, hasta el momento que empezamos a sentir como nuestras cervicales cada vez se estiran mas, hasta el punto de ir eliminando tension y rigidez en la zona cervical.
Cabeza y cuello: Hay una imagen fundamental en este trabajo que es
imaginar como un hilo que tira de la coronilla con suavidad hacia el
cielo. De esta manera estiramos ligeramente las cervicales hacia arriba.
El mentón puede ir en este movimiento ligerísimamente hacia dentro y
hacia abajo.
Es interesante también realizar un examen de todas las zonas del cuerpo, para ir relajandolas una a una, frente, ojos, mejilla, cuello, cuero cabelludo,
hombros, etc... tomando unos segundos para relajar cada zona.
La respiracion debe ser en todo momento, consciente, suave, pausada o relajada.
A continuación os dejamos un video explicativo, para que tengais una idea gráfica de como realizar correctamente este ejercicio estático:
Os recomendamos que al principio, mantengais esta posicion unas diez respiraciones, y a medida que integreis la posicion mejor, vayais incrementando el tiempo que querais, para poder tomar la maxima conciencia de nuestro cuerpo y espiritu.
Esperamos que estos consejos os sean de gran ayuda. Cualquier duda que podais tener, podeis dejar vuestros comentarios!
El qì gōng (氣功) procedente del chino pinyin, es el Chi Kung. “Qi” es energía vital, “Gong” es trabajo, por lo tanto su traducción sería "trabajo de la energía". Es una disciplina, incluida en la medicina tradicional china, que exige dedicar mucho tiempo, para mejorar la energía vital del cuerpo, y así mejorar la salud.
Los expertos en medicina tradicional china, se han hecho
presentes a lo largo de la historia, representando una
cultura que tiene a la salud, como objetivo principal.
El Qigong o Chi Kung es una destreza que se practica
fundamentalmente, para alargar la vida y cultivar la salud. Es considerado como una práctica
corporal que cualquier persona de cualquier edad, puede realizar,
siempre y cuando se mantenga en consonancia con su espíritu, la
naturaleza y las leyes
universales, aportando a sus practicantes, múltiples beneficios para la salud mental, física y espiritual. Desde hace de miles de años, las prácticas
medicinales y culturales chinas, se han interesado por la
prevención de enfermedades, es por ello que el Chi Kung es una terapia que aporta para quien lo
practica, un sistema para prolongar su vida.
¿Qué es el Qi?
La filosofía china describe que el Qi es la energía o fuerza natural que enmarca a todo el universo,
por lo tanto, se encuentra en cada espacio de la tierra y el cielo,
incluyendo a cada especie viviente sobre el planeta. Científicamente no
existe una definición para el Qi, algunos consideran que se trata de
energía eléctrica, otros afirman que es electromagnética o que
simplemente se trata de calor.
Cuando la persona se siente debilitada o enferma es porque su Qi se encuentra bloqueado,
por lo que es recomendable asistir a terapias de acupuntura para que se
trate directamente la reactivación del Qi por medio de estimulaciones
energéticas, en combinación con el Qigong que desempeñaría una función más preventiva, constante, y finalmente curativa.
El Qigong, al ser considerado como parte de las
cinco ramas que conforman la medicina tradicional china, es una parte fundamental en procesos
terapéuticos. Hoy en día, se ha vuelto una práctica
habitual para tratar males de todo tipo, sobre todo en parques y amplios
espacios, donde la naturaleza abunda.
Origen del Qigong
El origen de la medicina china y con ella el Qigong, datan desde hace más de 4.000
años. Hay pruebas históricas que indican que
durante el tiempo de la Dinastía YAO (2333 a.C. -2206 a.C.), las personas practicaban una danza
para fortalecer el cuerpo, regular la respiración, la circulación de
la energía (Qi) y la sangre, para curar sus enfermedades.
Durante las primaveras y otoños, en los Estados Guerreros (720-221 a.C.), el Qigong se desarrolló como nunca antes. Dao Yin Shu, una forma antigua de Qigong, era muy popular durante esa época.Según las tradiciones budista y taoísta, de donde procede la gran
parte de los estilos de Qigong, es también un método para alcanzar la
iluminación o budeidad, la paz interna, la libertad y la felicidad.
Según el Confusioismo, es un método para mejorar la comprensión,
tolerancia, la manera de ser. Puede ayudar a tomar decisiones de la
vida.
Su objetivo es estimular la energía vital que
necesita el organismo para que esta fluya en cantidades óptimas,
siempre teniendo en cuenta que dicha energía debe circular por los
meridianos del cuerpo. La concentración mental, los suaves movimientos
físicos y los ejercicios de respiración son la base para practicar el Qigong o Chi Kung. Todos estos elementos
combinados ayudan al ser humano a movilizar, conscientemente, la energía
que aporta la naturaleza, haciendo que se desplace por todos los canales energéticos del cuerpo.
Es así como el Qigong se fundamenta, en respirar la
esencia de la vida, regulando la respiración para conservar el
espíritu, y manteniendo la mente y cada músculo del cuerpo en total
relajación. Además, es considerado como el arte de preservar la energía
para que esta recorra el cuerpo de manera armoniosa.
La diferencia entre el Chi Kung y el Taichí es
que el Tai es el arte del puño, es decir, su finalidad es trabajar en
la energía para que sea utilizada en la lucha, mientras que el Chi Kung
busca sanar a la persona por medio de la energía.
¿Te sientes cansado, estresado y necesitas parar?... ¿Quieres saber como aumentar, renovar y optimizar tu energía?...
La práctica de Qigong o Chi Kung, reduce el estrés, regula desequilibrios emocionales, eleva la autoestima etc... Utilizando la mente, respiración y los movimientos del chikung, activamos la circulación energética en nuestro cuerpo a través de los meridianos, fortaleciendo órganos internos, huesos, articulaciones y músculos.
Qigong Valencia nace para promover y divulgar el Chi Kung y el Taichi en la ciudad de Valencia y sus alrededores, ofreciendo enseñanzas abiertas a todos y para todos las edades. Al aire libre,
siguiendo la tradición china, para armonizar nuestra energía vital con
la naturaleza.
¿Quieres iniciarte o profundizar en esta disciplina que aporta salud, equilibrio y armonía interna? ¿Quieres
conectar con tu interior y disfrutar de mayor energía en el aquí y
ahora? ¿Quieres despertar tu conciencia y transformar tu día a día?
Si lo deseas, tanto si tienes experiencia
como si no, independientemente de tu condición física, puedes practicar Chi Kung, para poder sentirte mejor en tu cuerpo y espíritu, poniendo
energía en
tu camino de vida.
¡Anímate a hacer este maravilloso viaje y descubre tu interior!